Australia empató a un gol con Ecuador.

Ecuador y Australia dividieron honores en el segundo partido del Grupo C. 1-1 finalizó el encuentro, que tuvo un muy buen primer tiempo, pero un deslucido segundo.

Los ecuatorianos se sintieron en casa. O al menos los manizaleños los hicieron sentir así. A excepción de 15 australianos que alentaban en occidental, el resto de aficionados hicieron fuerza por los muchachos de Sixto Vizuete.

Fue Australia el que comenzó a crear peligro sobre el arco rival. A los 28 segundos de haber comenzado el partido, Danning quedó solo en al área tras un centro, pero la envió por arriba. La suerte suya, también la tuvieron Amini y Warren, que al minuto 10 y 14 estuvieron cerca de anotar. Ecuador se demoró para pisar el área de Australia. Pero desde el minuto 18, cuando Marcos Caicedo remató de fuera del área, los ecuatorianos se adueñaron del juego.

Al minuto 24 llegó el primer tanto de la fría noche. Marcos Caicedo, gran figura del primer tiempo, desbordó por la derecha y remató. Birighitti atajó, pero el rebote lo tomó Govea, que disparó fuerte arriba.

De no ser por el arquero australiano, que estuvo atento, Ecuador se hubiese ido con dos goles más al término de la primera etapa. Perdonaron y luego lo pagarían.

Sobre la hora

Si el periodo inicial tuvo emociones en arco y arco, la parte complementaria fue todo lo contrario. Australia, con más ganas que fútbol, intentó empatar. Ecuador se limitó a aguantar la ventaja.

Los que si se gozaron la fiesta de principio a fin fueron los australianos que se hicieron en la parte baja de occidental. Con sus rostros pintados de amarillo y verde, no pararon de cantar y lanzar balones de plástico a la parte alta de la tribuna.

Cuando ya muchos se paraban de sus sillas y firmaban la victoria ecuatoriana, apareció la sorpresa de la noche. Un tiro libre de unos 30 metros terminó por darle la igualdad a los ´socceros´. Thomas Oar sacó un zurdazo y la puso en todo el ángulo. Golazo. Más que premió para Australia, castigo para Ecuador por el pálido segundo tiempo que hizo.

Felicidad para ese puñado de australianos que salieron más felices de lo que estaban. Ambos conjuntos quedaron con un punto y deberán mejorar más para medirse ante la favorita España.